_
_
_
_
_
METROSCOPIA
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Vendaval en Andalucía

Por primera vez en democracia, los socialistas podrían perder la hegemonía en la región

Los datos del sondeo de Metroscopia son contundentes: por primera vez en la actual democracia el PSOE podría perder, y de forma clara, la primacía en Andalucía, su feudo electoral más emblemático, en favor del PP. Esto es algo que no parece inquietar de forma especial a los andaluces, ni siquiera a quienes votan tradicionalmente al PSOE. Según datos recientes, asimismo de Metroscopia, la clara mayoría absoluta de los votantes socialistas andaluces no siente mayor inquietud ante este anticipado triunfo de los populares: seis de cada diez contemplan esta eventualidad con indiferencia o, incluso ¡con esperanza! En cambio, solo les preocupa a cuatro de cada diez.

Con todo, en las dos semanas que quedan hasta la cita con las urnas ¿puede cambiar significativamente este panorama? Puede, pero resulta improbable. Los propios votantes socialistas andaluces dan ya por perdido, y de forma rotunda, el partido. Su actual estado de ánimo no parece el más propicio para pensar que pueda de pronto originarse una remontada de última hora que, aunque no bastase para cambiar el signo del resultado, sí lograra al menos matizar sustancialmente su magnitud. La hipotética remontada requeriría una sustancial movilización de un electorado que lleva meses anclado en el desentendimiento respecto del ya inminente proceso electoral: en el momento actual, la fidelidad declarada de voto de los socialistas andaluces sigue fija en un 44%, al tiempo que un 25% sigue diciendo que no sabe lo que va a hacer —respuesta que a estas alturas cabe entender más bien como una forma elusiva de decir que lo más probable es que no se acuda a votar—. Requeriría también que ese 20% de votantes socialistas que se declaran ahora dispuestos a dar su voto al PP (15%) o a IU (5%) retornen al redil. Y, puestos a pedir, requeriría también que aflojase algo el ardoroso compromiso con su partido que desde hace meses muestran los votantes del PP. Todo ello, sin duda, posible. Pero, realmente poco, muy poco probable.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_