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Kenia irrumpe en Somalia para combatir a los islamistas y evitar más secuestros

“No se trata solo de las dos mujeres españolas, también hay más secuestrados", dice un portavoz Somalia asegura desconocer la incursión de las tropas de su país vecino No hay noticias de dónde se pueden encontrar las dos cooperantes secuestrada el pasado jueves

Montserrat Serra y Blanca Thiebaut, las dos cooperantes de MSF secuestradas.
Montserrat Serra y Blanca Thiebaut, las dos cooperantes de MSF secuestradas.EFE

El ejército keniano se ha internado hoy en territorio somalí para combatir a la milicia islamista rebelde Al Shabab, ligada a Al Qaeda y a la que las autoridades kenianas culpan del secuestro el jueves pasado de las dos cooperantes españolas Montserrat Serra y Blanca Thiebaut.

“Vamos a perseguir a Al Shabab allá donde se encuentren y como sobre todo están en territorio somalí, pues sí, es cierto, nuestras tropas han entrado en Somalia”, ha reconocido a EL PAÍS Alfred Mutua, portavoz del Gobierno keniano. “El objetivo principal de la operación es alejar a Al Shabab de nuestras fronteras”, ha indicado Mutua.

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El Ejecutivo del país africano ya había avanzado ayer sus intenciones. Según su portavoz, Nairobi  tenía información de que los secuestradores estaban en un área alrededor de la frontera  "o ya al otro lado". Matua avanzó en conversación con este diario que de confirmarse las sospechas de que los bandidos se están en suelo somalí entrarían "a por ellos".

“No se trata solo de las dos mujeres españolas, también hay secuestradas una británica y una francesa y hay más rehenes, incluyendo a ciudadanos kenianos, y por supuesto también los tenemos en cuenta a la hora de luchar contra Al Shabab”, ha explicado hoy Mutua sobre las rehenes secuestradas en territorio keniano en el último mes.

Testigos citados por medios locales han señalado que varias columnas de soldados kenianos habían cruzado la frontera con Somalia, apoyados por tanques, camiones y hasta helicópteros y aviones de combate. El Ejecutivo keniano no ha querido confirmar estos datos y ha señalado que no podía dar detalles de la operación militar.

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Aunque nunca lo ha reconocido oficialmente, no se trata de la primera vez que el Ejército keniano se adentra en territorio somalí. A principios de este año, unidades especiales establecidas en el puesto fronterizo de Liboi, a unos 90 kilómetros del campo de refugiados de Dadaab, cruzaron la frontera y mataron a varios militantes como represalia por un ataque sufrido en su base.

"Kenia es un país amigo"

 Por su parte, el Gobierno somalí no ha reconocido la presencia de tropas kenianas en su territorio.  “No hemos recibido ninguna información de que tropas kenianas hayan entrado en Somalia”, ha dicho por teléfono desde Mogadiscio Abdirahman Omar Osman, portavoz del Gobierno federal de transición somalí, al que apoya la comunidad internacional.

 “Kenia es un país amigo, tenemos muy buenas relaciones con ellos y agradecemos su apoyo logístico y las ocasiones en que han entrenado a nuestras fuerzas, pero realmente no necesitamos que sus tropas entren en nuestro país”, ha añadido Osman.

"A pesar de la negación oficial del Gobierno de Somalia, Reuters cita fuentes militares somalíes que hablan de un plan conjunto con el ejército keniano para iniciar una ofensiva contra Al Shabab".

El Ejecutivo somalí solo controla directamente la ciudad de Mogadiscio, mientras que es Al Shabab quien controla gran parte del centro y sur del país, con la excepción de algunas zonas en que milicias leales al gobierno también luchan contra Al Shabab.

Somalia no ha tenido un Gobierno central que controlara todo su territorio desde la caída del dictador Siad Barré en 1991, y desde entonces se encuentra en un estado de guerra casi constante entre diferentes milicias, clanes y facciones.

 “Somalia es un Estado soberano y por supuesto no toleraríamos la invasión de nuestro territorio por un país extranjero”, explicó en Nairobi a El País Mohamed Ali Nur, embajador de Somalia en Kenia, quien coincidió con la versión ofrecida por su gobierno. “Las autoridades kenianas pueden decir lo que quieran, pero nosotros no tenemos ninguna información de que tropas kenianas hayan entrado en Somalia.

El Gobierno somalí ha confirmado a este diario que este sábado milicias pro gubernamentales consiguieron expulsar a los militantes de Al Shabab del pueblo de Qoqani, en el sur del país cerca de la frontera con Kenia.

Varios medios somalíes han informado de que las milicias leales al Gobierno habían recibido apoyo de bombardeos aéreos que, según algunas fuentes, habrían sido realizados por helicópteros kenianos. Alfred Mutua ha negado este extremo y ha insistido en que no podía entrar en detalles de la operación militar: “De lo contrario, nuestros enemigos averiguarán dónde estamos y nos atacarán”.

Aviones no tripulados

 En los últimos meses, Estados Unidos ha admitido haber utilizado aviones no tripulados, o drones, para realizar incursiones en el espacio aéreo somalí y bombardear objetivos de Al Shabab, a quien la CIA identifica como la rama de Al Qaeda en el este de África.

 La embajada de Estados Unidos en Nairobi no ha querido hacer ningún comentario sobre los bombardeos de los que se informó hoy en Somalia.  En cuanto a las rehenes europeas, Al Shabab ha negado desde un principio y en todo momento estar detrás de estos secuestros.

 “Niego absolutamente cualquier implicación de Al Shabab en el secuestro (de las cooperantes españolas)”, ha dicho a EL PAÍS un oficial de esta milicia desde el sur de Somalia.

 “Lo que Kenia tiene que hacer es proteger a la gente en su propio territorio, nada de entrar en Somalia o perseguir a Al Shabab, además, son demasiado débiles para hacer algo así”.

 “Además, es una locura, no tiene sentido que secuestremos a personas que están ayudando a nuestra gente (refugiados somalíes en Dadaab), ¿cuál sería el beneficio?”, ha insistido este militante.

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