3.000 militares, 55 aeronaves y una silla para el Rey
Asientos en la tribuna y museos gratis, novedades de la celebración de este año
Más de 3.000 militares, 147 vehículos y 55 aeronaves participan hoy en el desfile con motivo de la Fiesta Nacional que arranca a las 10.30 de la mañana en la Glorieta del Emperador Carlos V y terminará en la Plaza de Colón, un recorrido un poco más largo que el año pasado. Las tribunas estarán en la plaza de Neptuno, donde se izará y rendirá homenaje a la bandera. Por primera vez habrá sillas, ya que los médicos han aconsejado al Rey, de 73 años, que preside el acto, que no realice esfuerzos tras su reciente operación en el tendón de Aquiles.
La convalecencia del Rey también ha motivado que este año, en la recepción en el Palacio Real, no haya el tradicional besamanos ni tampoco discurso. El monarca saludará brevemente y después se retirará.
La organización pedirá por megafonía respeto en los momentos más solemnes del desfile —el himno, el homenaje a los caídos y a la bandera— para evitar las pitadas y abucheos al Gobierno de Zapatero de los últimos años y por los que el Rey mostró su malestar el año pasado.
El monarca saludará brevemente y después se retirará
Seis ministerios (Defensa, Cultura, Asuntos Exteriores, Medio Ambiente, Sanidad y Presidencia) han participado este año en la preparación de los actos por el Día de la Fiesta Nacional, que por primera vez incluirá actividades culturales. Así, será gratis la entrada en el Museo del Prado, el Reina Sofía, el Thyssen o el del Ejército, en Toledo. Cerca de 40 museos, palacios y jardines de Patrimonio Nacional celebrarán hoy una jornada de puertas abiertas.
Las que no abrirán, en cambio, serán las del Congreso y del Senado. El presidente de la Cámara baja, José Bono, argumentó que sus jornadas de puertas abiertas son el 7 y el 8 de diciembre, durante la conmemoración de la Constitución.
El ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, aseguró durante la presentación del programa de actos por la Fiesta Nacional que este año era el comienzo de una nueva forma de celebrarlo, convirtiéndolo en una “fiesta cívica a la que en próximos años se puedan sumar todas las ciudades”.
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