La Audiencia Nacional condena a 30 años a Carasatorre por el asesinato de Ordóñez
‘Zapata’ era el último de los miembros del comando pendiente de sentencia
El etarra Juan Ramón Carasatorre, alias Zapata, ha sido condenado por la Audiencia Nacional a 30 años de prisión por el asesinato del concejal del PP en el Ayuntamiento de San Sebastián Gregorio Ordóñez, perpetrado el 23 de enero de 1995. El tribunal lo considera autor de un delito de asesinato terrorista, consumado junto Javier García Gaztelu, Txapote, y Valentín Lasarte, también integrantes del comando Donosti, y ya condenados por este crimen. La sentencia, que se ha conocido esta mañana, impone al condenado el pago de una indemnización de 650.000 euros.
La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional considera probado que Carasatorre, García Gaztelu y Lasarte tomaron la decisión de matar a Ordóñez “con frialdad”, y con ese fin recabaron la información necesaria para “aprovechar la primera oportunidad de matar” que se les presentó. Ante la dificultad de abordar al concejal en sus desplazamientos hasta el Ayuntamiento, cuyo itinerario y horarios variaba diariamente, los etarras le asesinaron mientras almorzaba en un restaurante con otras personas, entre ellas, la exdirigente popular María San Gil, entonces secretaria personal de Ordóñez.
El asesinato se consumó “a traición y sobre seguro, cogiendo desprevenida a la víctima”, añade la sentencia. Carasatorre y García Gaztelu entraron en el local y se dirigieron hacia la mesa en la que se encontraba Ordóñez, que entonces tenía 36 años. La sentencia relata que uno de ellos se situó tras el concejal popular, a quien, “situándose detrás del mismo, a muy corta distancia, con una pistola que portaba marca Browning HP-35 del calibre 9 mm. Parabellum, le disparó a la cabeza matándole”. La resolución no determina la autoría del disparo, si bien considera que esa circunstancia es “penalmente irrelevante” para condenar a Carasatorre, por haber quedado probado que “estuvo en la ideación, en la decisión y en la ejecución del hecho”.
El tribunal ha concedido especial relevancia a las declaraciones en el juicio del etarra disidente Valentín Lasarte, en las que reconoció haber integrado el comando Donosti junto a Carasatorre y García Gaztelu en la época en que se cometió el asesinato. Tanto Lasarte como García Gaztelu fueron condenados por la Audiencia Nacional en 1997 y en 2006, respectivamente.
