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El PP tiene en Galicia 212 alcaldes en 310 Ayuntamientos

Socialistas y nacionalistas pactan en 32 de los 35 municipios donde no hubo mayorías absolutas, entre ellos Vigo, Lugo, Ourense y Pontevedra

Abel Caballero con la vara de mando de la alcaldía de Vigo.
Abel Caballero con la vara de mando de la alcaldía de Vigo.LALO R. VILLAR

PSOE y Bloque Nacionalista Galego sellan un pacto en Galicia como dique de contención contra el avance de la derecha que, pese a todo, tendrá alcaldes en 212 Ayuntamientos de los 310 que se han constituido esta mañana. Los populares todavía podrían hacerse en las próximas semanas con el bastón de mando en cuatro de las cinco corporaciones que por distintas razones (fundamentalmente recursos judiciales) no han tomado posesión esta mañana. El rodillo del PP ha propiciado que por primera vez en la historia de la autonomía un alcalde popular (Carlos Negreira) gobierne A Coruña, feudo tradicional de la izquierda que ha gobernado la capital gallega en los últimos 28 años.

Finalmente socialistas y nacionalistas han llegado a acuerdos para repartirse 32 Ayuntamientos donde las urnas no depararon mayorías absolutas. Vigo, la mayor ciudad de Galicia, tendrá regidor del PSOE gracias al apoyo de los nacionalistas que esta vez han decidido no entrar en el Gobierno. En Lugo y Ourense sí habrá coalición con un socialista al frente del bastón de mando y en Pontevedra, el nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores repite como alcalde con el apoyo del PSdeG. Sin sorpresas en las ciudades, las sesiones de constitución de los Ayuntamientos han estado marcadas por las protestas de pequeños grupos de indignados, que en Vigo incluso fueron desalojados del salón de plenos.

El exalcalde de A Coruña, Paco Vázquez (derecha), saluda al nuevo regidor, el popular Carlos Negreira.
El exalcalde de A Coruña, Paco Vázquez (derecha), saluda al nuevo regidor, el popular Carlos Negreira.LALO R. VILLAR

Las cúpulas de las fuerzas progresistas no han logrado frenar la indisciplina en tres localidades, Fene (A Coruña) y Moaña y Cuntis (Pontevedra), donde el PP ha logrado las alcaldías por la falta de acuerdo entre la izquierda. El caso más sorprendente ha sido el de Moaña, donde el número dos de la lista socialista no ha votado al candidato del BNG, la fuerza mayoritaria de la izquierda, lo que ha permitido alcanzar el bastón de mando al diputado autonómico popular José Fervenza. El PSdeG anuncia un expediente contra el edil díscolo.

El Partido Popular no ha tardado ni un mes en incumplir su promesa electoral de dejar gobernar a la lista más votada y tampoco ha tenido reparo en pactar con grupos independientes allí donde le resultaron útiles para completar sus mayorías. Durante la campaña el líder del partido y presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, subrayó que su formación no pactaría con “independientes que no defienden el interés general”. Es de suponer que sí lo hace el candidato de Sada (A Coruña), Ramón Rodríguez Ares, escindido del PP e histórico alcalde franquista que sumó sus votos para aupar a la alcaldía al candidato popular en detrimento del del Bloque que obtuvo más votos. Episodios similares se han repetido en Moeche y Negreira, dentro de la misma provincia coruñesa, donde los populares también pactan con siglas independientes de escindidos del PP para conservar el poder pese a no haber sido la fuerza más votada.

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