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CiU facilita que el Parlamento catalán cierre el camino a la independencia

Mas se abstiene y desprecia el debate en la Cámara al ir solamente a votar Solo 14 diputados respaldaron la ley propuesta por Solidaritat Catalana per la Independència

Un grupo de independentistas ante el Parlamento catalán donde se debatía la propuesta de ley sobre la independencia.
Un grupo de independentistas ante el Parlamento catalán donde se debatía la propuesta de ley sobre la independencia.EFE

El independentismo catalán se topó ayer con la realidad parlamentaria. Solo 14 diputados respaldaron una ley, propuesta por Solidaritat Catalana per la Independència, que establece los pasos para que esta autonomía proclame su secesión del resto del país. Un jarro de agua fría tras la consulta soberanista de Barcelona, que se cerró el domingo con una participación del 18%.

CiU, que se atrevió ese día a respaldar la independencia en una votación alegal y no vinculante, recuperó ayer su habitual ambigüedad: su abstención facilitó que la norma no prosperase. Sí lo hicieron las enmiendas a la totalidad de PSC, PP y Ciutadans. Solo ERC y Solidaritat apoyaron la norma.

El presidente catalán, Artur Mas, se escondió para votar en la consulta, y ayer también se ausentó del debate, despreciando la discusión para solo acudir a votar.

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CiU razonó su contradicción recitando el dogma que estableció el presidente de la Generalitat durante su discurso de investidura. "Que estemos de acuerdo con el qué no significa que estemos de acuerdo ni en el cómo ni en el cuándo", resumió su portavoz, Jordi Turull, que aseguró que la vía de CiU es "la transición nacional hacia el derecho a decidir".

Eso sí, Mas defendió su derecho a participar en la consulta soberanista: "Como ciudadano tengo todo el derecho de ir a votar, como el Rey si un día va a votar en un referendo".

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La oposición afeó la pasividad de CiU en el debate. Solidaritat intentó hasta última hora convencer a los nacionalistas para recabar su apoyo. Los independentistas organizaron una concentración frente al Parlamento autónomo -sus tres diputados han pasado las dos últimas noches al raso, frente a la Cámara- para presionar a CiU. Pese al fracaso, la formación lo volverá a intentar en esta legislatura.

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