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En México: “Paciencia, mucha paciencia”

Las pistas de los expatriados españoles en México para quienes quieran seguir su camino ¿Vives en México? Cuenta tu experiencia a otros y todo lo que les pueda resultar útil Escríbenos a expatriados@elpais.es o utiliza el hastag #trabajarenMexico

Aquí recogeremos las pistas y consejos de los expatriados que viven en México para quienes quieran buscar trabajo y establecerse en el país:

José Ramón Fuentes Campos 

Paciencia, mucha paciencia

 -Vive relativamente cerca de donde trabajes, hay atascos todos los días y a todas horas, es un poco desesperante.

- No comas en la calle, deja que pasen unos meses a que tu estómago se adapte a la comida mexicana, picante y bacterias.

- Los trámites con inmigración son lentos y pesados, calcula mínimo entre tres y seis meses para conseguir el permiso de residencia y trabajo para un año.

-México DF es bastante seguro, intenta vivir en las colonias Polanco, Roma o Condesa.

-Trae dinero al principio o arregla bien los papeles y condiciones con la empresa, nadie que no tenga la visa de inmigración puede abrir una cuenta de banco ni nada parecido.

-Cuidado con la comida y el picante, todo puede picar, hasta lo que menos sospechas.

Leticia Sánchez

Leticia Sánchez en México.
Leticia Sánchez en México.

Trabajo en Toluca, en México, como profesora de Derecho Procesal. Llegué el 4 de agosto. Tras tres años en paro me decidí por buscar trabajo fuera. A través de e-mail en los que incluía mi CV y carta de presentación, mandé mi candidatura a todas o la mayoría de las universidades de México, en las que se imparte la Licenciatura de Derecho. También busqué en Chile y Perú. Tras varios contactos con universidades interesadas, solo una quiso entrevistarme por Skype, promocionar mi visa y aguantar hasta mi llegada (ocho meses después de todo el papeleo). Es un colegio universitario privado y pequeño.

El choque cultural ha sido muy grande, tanto que he llegado a enfermar por el cambio, los nervios y las dudas sobre si había decidido bien. Ya lo he superado, gracias a personas muy amables y generosas que me han ayudado cuando estaba mal. Pero sobre todo, por la experiencia de dos de mis hermanas, expatriadas desde hace cinco años en EE UU y Reino Unido. Como yo, se fueron con trabajo desde España, y continúan fuera, porque avanzan y crecen profesionalmente, posibilidades que no se nos permiten en nuestro país.

Tras estos dos meses tan intensos, ya no pienso en cuándo volveré, porque no lo sé. Estoy feliz por poder trabajar en lo que quiero y tanto he buscado en España, porque las puertas que allí me han cerrado han hecho que aquí, diez años después, se me abra una ventana. Ahora pienso que mis alumnos aprendan, en avanzar y poder trabajar en una universidad más grande, porque hacia atrás ya no quiero volver.

Mariano Ramírez

Mariano Ramírez con sus alumnos.
Mariano Ramírez con sus alumnos.

Soy Ingeniero en Diseño de Producto por la Universidad de Skövde (Suecia), Máster por la Pompeu Fabra de Barcelona y dos posgrados: uno de arquitectura efímera por la Escuela Superior de Arquitectura de la Politécnica de Madrid y otro de Consolidación de Empresas por la Escuela de Organización Industrial de Madrid. Nací en Almería hace ya 30 años y he vivido en muchos sitios:  Málaga, Barcelona, Suecia, Madrid... y ahora en DF (México)

Hace dos años salí voluntariamente de mi empresa de producción en publicidad.  Sí renuncié a mi buen sueldo y a mi contrato indefinido en plena crisis. Monté mi propio estudio de diseño industrial con mi socia mexicana en Madrid. Se llama MadridDF y solo pudimos sobrevivir de octubre a junio (9 meses). Así que decidimos aventurarnos e ir al DF natal de mi socia.

Aquí empieza mi historia en México DF: llegué un 7 de septiembre (como la canción de Mecano) y a los tres días ya estaba colaborando en el Tecnológico de Monterrey en el DF. Actualmente soy profesor titular de dos asignaturas en el Tecnológico de Monterrey, de otras cuatro en la Universidad Centro del DF y dirijo e imparto el Posgrado de Instalaciones Efímeras también en la Universidad Centro. Además, sigo con mi despacho en el poco tiempo que me queda y llevamos el diseño del próximo Congreso Nacional de Alzheimer en el DF, entre otros proyectos.

Os escribo esto para demostrar que, aunque no hay día que no me acuerde de Madrid (ciudad donde viví los últimos cinco años antes de venirme al DF), de mis amigos y familia (y mi moto)... con muchísimo esfuerzo y con la esperanza de que todo se arregle en España tarde o temprano, se puede sobrevivir en una ciudad tan loca como el DF.

Julio A. Hernández González

Llegué el 22 de Noviembre de 2010. Trabajo en una filial de una multinacional española. Provengo de la matriz en la que he trabajado por muchos años.

Julio Antonio de ruta en moto con su amigo Manuel.
Julio Antonio de ruta en moto con su amigo Manuel.

Vine como apoyo a un proyecto y acabé tomando una posición aquí, digamos, permanente con un contrato local (no expatriado).

El país en general tiene algunos elementos que como comentamos con gente europea, hay que saber llevarlos y el día que te colmen te irás:

-Violencia (en el DF ha mermado mucho y hoy no es más inseguro que Nueva York)

-Sanidad Pública (un desastre y para extranjeros además un componente de riesgo acudir a estos centros); Imprescindible un seguro médico privado (la mayoría caros), buenas tarjetas de crédito y ahorrillos en la cuenta por lo que pudiera pasar.

-Educación publica de calidad (si tienes hijos prepara un buen dinero). No es mi caso.

-El tráfico en el DF (10.000.000 de desplazamientos diarios). Me muevo en moto, pero se pierden “días” en desplazarse. Lo destacado es el alto nivel de ruido y la ausencia de “reglas” de circulación. Es como Casablanca pero con una población en DF de 22.000.000 de personas. Agujeros, topes, etc.

Si vives en el DF… Polanco, Condesa, La Roma y La del Valle son las opciones. Pero depende mucho de donde trabajes y cuál sea tu trabajo (yo veo clientes por toda la ciudad). Los desplazamientos como dije pueden ser un infierno. He usado taxi y metro por mucho tiempo (no es frecuente en este último que lo usen extranjeros, lo del traje y ordenador por ahí no es lo más recomendable), también existen microbuses (ojo, son peligrosos). Y desde hace tiempo moto para todo. Por el precio en que vivía en un apartamento/estudio en Madrid, aquí tienes un piso bien amplio.

Por lo demás la gente es amable, agradable y cercana. Muy educados en ese sentido con independencia del origen social y formación. No elevan el tono de voz y son tremendamente respetuosos.

Cierta dosis de clasismo para una sociedad polarizada (60.000.000 de pobres) jerarquizada y algún caso racista pero, por lo general, es muy fácil vivir entre ellos. Solo hay que acostumbrarse a que “ahorita” significa cuando ellos quieran (más o menos). Divertidos, animados, abiertos y hospitalarios. Esa es mi experiencia.

La comida bien, tienes fruta y verduras magnificas, carne también. Ojo con el picante y no comer en la calle (ya me enfermé cuatro veces). Agua embotellada y no hay pescado casi (eso sí me cuesta en mi caso).

He viajado por gran parte del país, incluida la llegada a la vecina Guatemala y al vecino “incómodo” Estados Unidos, siempre en moto. Hoy me parece un país bello, lleno de contrastes maravillosos y de una naturaleza increíble. También cuenta con millones de sitios por descubrir. Existen zonas imposibles donde vivir por la lacra del narcotráfico y en resumidas cuentas, pienso seguir viviendo en él.

Un país que vale la pena y que merece más de lo que hoy tiene. Una buena opción para vivir.

Azahara Mesa

Azahara Mesa con dos de sus estudiantes después de una conferencia que impartió para universitarios
Azahara Mesa con dos de sus estudiantes después de una conferencia que impartió para universitarios

Yo no vivo en DF ni en ningún estado del centro del país... vivo en el Sureste mexicano, en una ciudad que se llama Villahermosa (estado de Tabasco, sí como la salsa). Un estado que si no hubiera sido por el boom petrolero seguiría casi incomunicado, pero el petróleo todo lo consigue y ahora es una de las ciudades más caras del país, pero con grandes desigualdades... como es habitual en Latinoamérica.

Me casé en 2010 con un mexicano, y en vistas de que para él, ya con la crisis empezando, iba a ser muy difícil encontrar trabajo... decidí agarrar las maletas un 25 de noviembre de 2010 y emigrar a México. Por aquel entonces yo era estudiante de doctorado de la Universidad de Córdoba. Terminé mi tesis de doctorado en junio de 2011 y tuve la gran suerte de que en agosto en un centro público de investigación ofertaban una plaza de investigador que coincidía exactamente con mi perfil académico, me presenté y me concedieron la plaza. Una gran suerte porque es un centro público federal de gran calidad (podría decirse que soy una especie de funcionaría pública) se llama El Colegio de la Frontera Sur. Aunque existen algunas deficiencias, podría decirse que comparando como está la ciencia en España hoy en día, las condiciones para la investigación que tengo aquí son bastante buenas... eso sí, hay que cumplir con las publicaciones y proyectos de investigación, y mantenerte en el Sistema Nacional de Investigadores para conservar tu plaza... nada de que aquí se haga ciencia de segunda como me ha tocado escuchar en algunos lugares...

Mis primeros meses fueron bastante duros, echaba de menos todo, la familia, amigos, comida, modo de vida... pero un día me di cuenta de que si seguía comparando todo con España nunca iba a lograr adaptarme y así fue. Empecé a apreciar las cosas que México y su gente te ofrece, que son muchísimas... Hay que reconocer que venimos a su país, nos dan trabajo y debemos adaptarnos a ellos, no ellos a nosotros. Es un país acogedor y su gente encantadora, obvio te encuentras de todo como en botica... sobre todo el tráfico... los taxistas y los de las "combis" son mis enemigos en la ciudad... , pero poco a poco aprendes a lidiar con todo...

La comida en la calle la evito siempre... nuestro sistema inmunológico no es tan resistente como el de los mexicanos y me ha tocado alguna que otra intoxicación... así es que mejor no tentar la suerte...

En cuanto a la inseguridad, acabas cambiando tus costumbres... tuve que hacerme a la idea que no podía caminar por la calle a las 5 de la mañana tras una noche de fiesta como hacía en Córdoba... evitas ir al super más tarde de las 8 de la noche, no sacas dinero del cajero tampoco a esas horas...

Sinceramente, no sé si algún día volveré a España... es triste , pero es la verdad... eso sí, no dejo de echar de menos ni un solo día mi gente y mi tierra...

Francisco Moreno

Levo cuatro años viviendo en México. Pertenezco a la generación que empezó a trabajar en los mejores años de España. Me licencié en Derecho, hice un máster en Urbanismo y enseguida encontré trabajo. Tuve varios empleos, pero los cambios siempre eran a mejor. Me casé, nació mi hija y vivíamos una vida muy tranquila y acomodados en la clase media. Todo cambió en 2009. En ese momento trabajaba en asesoría financiera y ya veíamos venir las nubes negras. Hablamos mi esposa y yo y decidimos que antes de que empeorara la crisis nos teníamos que ir.

Por mi trabajo tenía relación con otros países y entre ellos estaba México. Toque muchas puertas hasta que a finales de marzo 2009 conseguí una entrevista. Fui pasando los filtros hasta que me contrataron. Tuve suerte en poder aterrizar en México con un contrato de trabajo en una empresa hispano-mexicana. Eso me dio tranquilidad, ya que no es fácil dejarlo todo para emigrar a otro país.

Lo primero que debes hacer, si quieres quedarte, es arreglar tu situación migratoria. No es fácil y tienes que tener mucho temple. En mi caso cada vez que iba me pedían algo nuevo. Tarde 6 meses en conseguir los papeles para toda la familia. Son documentos con vigencia de un año renovables por igual periodo.

Algo que aconsejo es renegar de esa actitud que tenemos los españoles cuando salimos de España. Lo comparamos y criticamos todo. Pero tengo una noticia, México no es España, lo mejor para adaptarse rápido es dejar de compararlo todo. Es fácil, todo es diferente.

Lo peor del DF, sin duda, es el tráfico. Se me ocurren todo tipo de palabrotas para describirlo pero lo resumo en una frase… te acorta la vida… Consejo, intentar vivir cerca del trabajo. Si quieres vivir en zonas que se asemejen a nuestro estilo de vida recomiendo Polanco, Condesa y Roma. Los precios de los alquileres no son baratos , pero igualando precios con España aquí consigues pisos de mayor tamaño.

Es una ciudad relativamente segura y con una oferta gastronómica, cultural y nocturna increíble. Consejo, no comas en los puestos de la calle. Si sales en la noche te aconsejo tomar taxis de sitio, son taxis de compañías reguladas y más seguras que tomar uno en la calle, si das positivo en el control de alcoholemia te mandan 72 horas encerrado en lo que llaman torito. No recomendable.

Al tener unas instituciones públicas muy deficientes, incluido la policía, extremadamente corrupta, te hace ver el mundo de otro modo. Aquí es cuando ves las grandes desigualdades de este país. Me explico…colegios públicos de lo peor del mundo…opción colegio privado con el coste que supone. Sanidad publica colapsada…opción, seguro médico, bastante caros por cierto… transporte público, tienen que verlo y muy peligroso…opción coche…y sigue sumando…

La clave del éxito en México es la aptitud. Disfruta de este país que es precioso y es mucho más que playas y sol. Laboralmente te ofrece un desarrollo profesional y económico no igualable en España

En mi caso gano tres veces más que en España y en una situación parecida se encuentran los españoles que he conocido en México. En su mayoría licenciados, con maestrías y trabajando para grandes corporaciones. Esto es un tema importante para los que estén pensando venir, no por ser español te van a pagar un gran sueldo. La competencia es dura, vas a competir con el mercado laboral mexicano que es muy clasista al igual que su sociedad. Compites para poder optar a los puestos importantes con jóvenes de clase alta preparados en universidades privadas, bilingües y maestrías en Estados Unidos. Seamos humildes y no pensemos que estamos mejor preparados. Mi consejo es estudiar bien el mercado laboral mexicano. Existe una lista de las mejores 500 empresas en México que puede servirte de guía. La realiza la revista Expansión (nada que ver con el periódico de España). Intenta cerrar entrevistas desde España y si es posible traerse algo de dinero para empezar.

Añoro mi tierra, nuestro estilo de vida, la familia, los amigos y nuestra comida, pero no tengo pensado volverme. Estoy cautivado por este país que me acogió con algunas espinas pero que ahora es mi hogar.

Paula Orejudo Prieto.
Paula Orejudo Prieto.

Paula Orejudo Prieto

Llegué al Distrito Federal desplazada por mi empresa española para un proyecto de siete meses aquí. Ha pasado un año y medio y ya no soy desplazada sino expatriada.

Soy ingeniera de Caminos, Canales y Puertos,  me siento muy afortunada por haber obtenido los papeles a través de mi empresa española y justo antes de que entrara en vigor la nueva ley migratoria (noviembre 2012) en la que exigen tramitar la visa de trabajo desde el país de origen.

Me fue muy difícil dar el salto, dejar a mi familia, terminar mi relación de pareja, despedirme de mi activismo dentro de una asamblea del 15-M, pero a día de hoy estoy muy contenta de haber dado este paso. Me he casado con una mexicana (los matrimonios homosexuales están legalizados en el Distrito Federal) y soy muy feliz.

¿Qué decirles a mis compatriotas que están pensando en México como una opción de vida?

En primer lugar les diría que este país es muy difícil por sus ritmos y por su desigualdad social. Todos los tiempos se multiplican por tres o por cuatro y hay que tener paciencia. Es muy difícil que te digan que "no" por lo que su "sí" hay que tomarlo con muchas reservas, no ilusionarse para no decepcionarse.

Desigualdad social, clasicismo y machismo. Tres cosas importantes con las que también hay que lidiar. Con paciencia, humildad y respeto.

Como extranjeros debemos olvidarnos del activismo puesto que nos pueden deportar del país si nos ven en una manifestación.

En D.F, el tráfico es desesperante por lo que es aconsejable vivir muy cerca del trabajo. Los atropellos peatonales están a la orden del día por lo que hay que ir con cuidado.

En tema de seguridad, es mejor no subirse a los taxis de la calle sino utilizar taxis de sitio. Por supuesto no hacer alarde de riqueza, ni moverse con prudencia en colonias desconocidas, sobre todo por la noche.

Aconsejo vivir, a buen precio, en las colonias Roma, Narvate o Escandón. Coyoacán es bellísimo pero queda alejado. Condesa y Polanco son más caras si bien es verdad que son más seguras y la mejor opción para gente con niños.

Lo bueno de México es su gran movimiento empresarial y cultural. Existen fuertes redes de apoyo por lo que es fácil integrarse y buscar una forma de vida. Además, la inmersión lingüística es fascinante.

Salvador Pocoví.
Salvador Pocoví.

Salvador Pocoví Martínez

Soy de Valencia y tengo 29 años. Estoy Licenciado en Química, con un Máster y terminé mi doctorado en julio de este año. Como la situación en España es muy complicada en todos los sectores, y en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ofrecían becas postdoctorales, decidí solicitarlas, me la concedieron y nos vinimos a México D.F. en agosto mi hija, mi mujer y yo.

Mi mujer y mi hija son mexicanas, aunque mi hija nació en Valencia, ya tiene la doble nacionalidad. En el sentido de la residencia yo lo tengo más fácil porque ya soy residente permanente por unidad familiar.

En cuanto a mi experiencia, México es un país lleno de oportunidades, de poder abrir negocios, aquí casi cualquier negocio prospera, aunque recomiendo que si vienes con la idea de montar negocio primero empieces a trabajar en algún lugar para que te den la residencia y, una vez aquí, ya puedes empezar a montar tu negocio con más seguridad.

La gente es muy amable, y en cuanto a los asaltos, secuestros, etc. que se ven en las noticias, he de decir que yo voy todos los días y vuelvo de la universidad en metro y no he visto nada, salgo a las 12 de la noche a la calle yo solo y no me ocurre nada, simplemente hay que saber dónde meterse.

Yo estoy muy agradecido a este país porque me ha dado la oportunidad que en España no iba a tener, y ya veremos si algún día puedo volver como investigador a mi país. He de decir que la comida aquí es excelente y que en cualquier lugar al que vayas te atienden muy bien sin excepciones.

Manuel López Martínez

Llevo un año y tres meses viviendo en México D.F. como Director Comercial de una Multinacional alemana. Yo también salí de España con trabajo como la mayoría de los que han escrito sus comentarios y para quien venga "a la aventura" recomiendo que investigue mucho, antes de lanzarse a dar un salto que no es nada fácil. Los consejos que han dado quienes han escrito su experiencia, fundamentales.

Acabo de leer las recomendaciones de los expatriados descritas y la verdad es que básicamente estoy de acuerdo en todo lo que se aconseja en las experiencias vividas por cada uno. Fundamental, no comparar, pero también inevitable. El choque cultural enorme, descomunal, mucho más grande de lo que cabe imaginar. ¿Cosas que me han sorprendido?:

Pues la primera, el contraste entre ricos y pobres, la enorme desigualdad, el racismo entre los propios mexicanos y ver cómo las clases pudientes tratan a sus propios compatriotas.

Otra cosa, el orgullo de ser mexicanos. Yo vivo en Santa Fe, que es uno de los barrios de negocios y residenciales de clase acomodada y desde mi casa veo el pueblo de Santa Fe, amasijo informe de casas grises de cemento sin pintar, con deficientes infraestructuras, pero orgullosos de ser lo que son mexicanos de convicción. Cuando llegan sus fiestas patrias, exhiben su bandera (enorme) en cada una de sus "chabolas" mostrando el orgullo de un país joven y que está contento de ser lo que es.

Mi sensación es que a los españoles nos perciben como una sociedad cerrada, "invasora" o de "reconquista", no entienden nuestros modos directos y "ofensivos" para su forma de hablar un idioma común que alberga muchas más diferencias lingüísticas de las que uno se puede en principio imaginar.

Para que os hagáis una idea, yo tengo en el escritorio de mi "computadora" un acceso directo al diccionario de la Real Academia de la Lengua y lo consulto con una frecuencia insospechada, pero resulta de lo más útil.

Otra cosa, es cierto que me he encontrado a españoles que vienen tratando como si fueran idiotas a los mexicanos y eso es muestra inequívoca de que ellos también lo son. Yo he pasado vergüenza ajena en algunas ocasiones de sentirme "paisano" como dicen aquí o compatriota de según qué españoles. Otros son gente de primera clase bien preparados, formados y de nivel, pero también hay mucho "mediocre" que viene buscando además a la colonia de españoles en puestos directivos como me ocurre a mí ofreciendo mediocridad, arrogancia, menosprecio por el país al que vienen y mala educación. Como ocurre en todos sitios y como dice un refrán "hay de todo como en botica".

Los mexicanos son recelosos de los extranjeros en general y de los españoles en particular. Os puedo decir que es francamente difícil encontrar al frente de una multinacional a un mexicano, generalmente son extranjeros, gringos, europeos o incluso argentinos o brasileños.

Los mexicanos con "poderío" suelen tener sus propias empresas mexicanas, fruto en muchos caso de situaciones hereditarias forjadas en tiempos de mayor desigualdad y además suelen no ser grandes empresarios ni buenos gestores, obtienen pingües beneficios inimaginables en el resto del mundo. Toda inversión que no se recupere en dos o tres años, no es inversión rentable..... Eso lleva a explotar miserablemente a sus propios empleados compatriotas sin ningún tipo de escrúpulo, por no hablar del machismo y de la preponderancia absoluta del hombre.

La oligarquía que mantiene el poder no quiere cambiar nada en el país porque miopemente ven que los cambios les van a perjudicar su situación de privilegio y se resisten a cambiar todo, pero en cambio, el mexicano tiende a culpar de sus males a los extranjeros (entre ellos a los españoles especialmente por la historia) y así nunca van a evolucionar al ritmo que ellos se imaginan.

Es fundamental que este país cambie su educación, su sistema fiscal, su redistribución de la riqueza y sobre todo que se organice un poco, de otro modo, será muy difícil que prospere. La conciencia del "todo vale" y a costa de lo que sea es absolutamente nefasta para un país que se sorprendería a sí mismo de lo que es capaz de llegar a ser en el mundo.

Es un país de oportunidades y mucho más de lo que el D.F. y las noticias muestran o de la Riviera Maya.

Es un país magnífico, difícil, quizá el D.F. sea su máximo exponente como mega ciudad que es, pero el resto del país es increíble, Guadalajara es una ciudad fantástica y el resto de México tiene una riqueza cultural, gastronómica y paisajística increíble. Nada de la aridez que veíamos en las películas de vaqueros, que también hay en el norte, pero hay un centro y un sur del país, sorprendentes, con enormes ríos, paisajes selváticos, gente encantadora, amigable y servicial. Un país que sin duda merece la pena y sobre el que a pesar de todo, yo estoy muy agradecido.


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