Carmona advierte a Sánchez: “Lucharé por cambiar la dirección del partido”

"Aquí lo que hay es mucho miedo, mucho pánico a que me presentara a ser secretario general del PSM", así de rotundo se ha mostrado este lunes Antonio Miguel Carmona, el hasta ahora portavoz del Partido Socialista (PSOE) en el Ayuntamiento de Madrid, después de enterarse de que la Ejecutiva regional —que dirige desde el viernes Sara Hernández— anunciase su retirada del cargo. Carmona ha contado en rueda de prensa que Hernández le ha ofrecido un puesto como senador a cambio de que dejase su acta como concejal, pero él lo ha rechazado. "Yo no tengo precio", ha apostillado y ha advertido a sus líderes de que seguirá intentando ser portavoz del PSOE en la capital y defender sus ideas.

Carmona ha negado que su destitución se deba simplemente a los malos resultados electorales de las comicios locales del pasado 24 de mayo —en los que obtuvo en torno al 16% de los votos— como ha explicado este lunes Sara Hernández, sino a disensiones internas del partido. "El cese es obra y gracia de la dirección federal". 

En opinión del dirigente socialista, la recién elegida Ejecutiva Regional no tiene legitimidad suficiente, con el 55 % de apoyos, para tomar una decisión tan relevante como apartarle de la portavocía. "Ya me pueden ofrecer lo que quieran que yo nunca dejaré de ser amigo de mis amigos, de pensar lo que pienso y de defender a mi partido", ha recalcado Carmona en referencia a Tomás Gómez, antiguo secretario regional, y de Juan Segovia.

El que fuera candidato del PSOE a la alcaldía de Madrid ha rechazado ser el responsable de los malos resultados que obtuvo su partido en las últimas elecciones municipales en la capital, pero cree que su relevo lleva tiempo fraguándose por ese motivo. "No es una decisión que haya tomado sólo Sara Hernández", ha indicado señalando hacia Pedro Sánchez. Carmona ha apuntado también a que los malos resultados

"No estoy de acuerdo con la dirección federal ni con la dirección regional, pero no estar de acuerdo no puede ser usado para apartarme. No estar de acuerdo es una bandera del socialismo", ha insistido Carmona. El socialista asegura que nadie del federal se ha dirigido a él y que seguirá luchando por la unidad del partido, que "no se merece lo que está pasando".

"Mi dignidad no tiene precio. Me debo a militantes, a ciudadanos y no a cuestiones internas, de las que yo apenas entiendo. Mi voz se seguirá escuchando durante semanas y meses, en defensa del PSOE", ha reiterado Carmona.